En el mundo de hoy, es súper complicado no meterse en deudas excesivas o tenerlas hasta el cuello. Si te endeudas sin control, te pones en una situación muy estresante y te trabas para lograr tus metas a largo plazo. Pero, tranquil@, hay maneras muy buenas de evitar acabar ahogado en un mar de deudas.
¿Qué son las deudas excesivas?
Las deudas excesivas (o también llamadas a lo bruto) son cuando alguien o algún grupo tiene una cantidad enorme de deudas que sobrepasa lo que pueden pagar o que les complica cumplir con otras responsabilidades de dinero. O sea, es cuando estás debiendo más de lo que puedes realmente pagar con lo que ganas y lo que tienes a la mano.
Ejemplos de deudas excesivas
A continuación, te presento algunos ejemplos de situaciones que podrían considerarse como deudas excesivas.
Tarjetas de crédito con saldos impagables
Si alguien tiene un montón de dinero en varias tarjetas de crédito y apenas puede pagar el mínimo cada mes, es casi seguro que está lidiando con una deuda excesiva. Con los intereses tan altos y otros cargos extras, la deuda se vuelve cada vez más complicada de manejar.
La verdad es que es como meterse en un embrollo sin fin. Entre más tiempo pase sin poder pagar esas tarjetas como se debe, más se incrementa la deuda por los intereses y los cargos extra que existen ( y vaya que sí). Es como una bola de nieve que va creciendo y creciendo.
Préstamos estudiantiles insostenibles
El dinero que te prestan para pagar tus estudios en la universidad (ya sea de 3 o 4 nivel) pueden convertirse en una carga financiera abrumadora si el monto total de esos préstamos supera con creces los ingresos disponibles después de la graduación. Si los pagos mensuales están por las nubes comparados con tus ingresos, entonces ya puedes hablar de una deuda estudiantil desbocada.
Sobregiro constante en cuentas bancarias
Si te encuentras en un ciclo constante de sobregiros en tu cuenta bancaria, esto indica que estas gastando más dinero del que tienes disponible. Los cobros por sobregiro y las comisiones te pueden caer como un balde de agua fría, y rápidamente, eso se convierte en una deuda que te aprieta el cuello.
Hipotecas incumplibles son parte de las deudas excesivas
Si compras una casa con una hipoteca que excede tu capacidad de pago mensual, es posible que te enfrentes a una deuda excesiva. Si los pagos de esa hipoteca que adquiriste, representan una parte desproporcionada de tus ingresos y gastos, se vuelve difícil mantenerse al día con los pagos y cumplir con otras obligaciones financieras que poseas.
Préstamos de consolidación de deudas fallidos
A veces, la gente piensa que sacar un préstamo para unir todas sus deudas les va a simplificar la vida. Sin embargo, si no se aborda la raíz del problema y los hábitos de gasto no se modifican, los préstamos de consolidación de deudas pueden resultar en una deuda aún mayor y más difícil de manejar.
¿Qué hay que hacer para tener una buena salud financiera y evitar deudas excesivas?
A continuación te doy algunos consejos prácticos para mantener una salud financiera sólida y evitar deudas excesivas.
- Haz un presupuesto que refleje tu realidad: El primer paso para no ahogarte en deudas es tener un presupuesto bien armado. Revisa cuánto dinero entra y sale cada mes y asigna lo necesario para vivienda, transporte, comida y diversión. No te olvides de apartar algo para ahorrar y para imprevistos. Seguir un presupuesto te ayudará a tener control sobre tus gastos y a evitar derrochar plata en cosas que no necesitas.
- Vive conforme a tus posibilidades: Pasarse del límite es la razón número uno por la que nos endeudamos más de la cuenta. Pon primero lo importante y evita gastos que no sean necesarios. Aprende a diferenciar entre lo que quieres y lo que necesitas, y piensa bien antes de comprar.
- No te lances a comprar sin pensar: Las compras impulsivas pueden hacerle un agujero a tus finanzas. Antes de comprar algo, tómate un momento para pensar si de verdad lo necesitas. Compara precios, busca ofertas y haz listas de compras para no caer en tentaciones que te puedan costar caro.
- Ahorra para imprevistos: Tener un fondo para emergencias te salvará cuando algo inesperado pase, como un arreglo del carro o gastos médicos. Pon una meta para tu fondo de emergencia y guarda dinero regularmente hasta alcanzarla. Así, tendrás una protección económica que te evitará tener que endeudarte para cubrir gastos inesperados.
- Paga tus deudas a tiempo: Si ya debes dinero, es súper importante pagar a tiempo para no tener que lidiar con multas y recargos. Empieza por las deudas con intereses más altos y trata de consolidarlas en un solo préstamo con una tasa más baja si puedes, para que sea más fácil pagar.
- Usa el crédito con cuidado: El crédito puede serte útil en ciertos casos, como para comprar casa o carro. Pero úsalo con responsabilidad. Evita pedir créditos que no necesitas y asegúrate de que tu deuda total esté bajo control en relación con lo que ganas. Paga tus tarjetas de crédito en su totalidad cada mes para evitar pagar intereses.
Para cerrar, mantener una buena salud financiera implica evitar deudas que sean demasiado pesadas. Siguiendo estos consejos, podrás tener control sobre tus gastos, guardar para el futuro y evitar el estrés que viene con deudas que se salen de control.
No olvides que la disciplina y tomar decisiones conscientes son cruciales para mantener tus finanzas en orden y alcanzar tus metas a largo plazo. ¡Hoy mismo empieza a tomar las riendas de tus finanzas y a evitar caer en deudas que sean un peso demasiado grande!
¿Qué consejos añadirías para evitar deudas excesivas y lograr mantener una salud financiera sólida?